Midori no Hibi: Convertirse en la mano derecha del diablo por amor…

Nombre original: 美鳥の日々

Año de lanzamiento: 2002-2004

Autor: Kazurou Inoue

Genero: Shonen, romance, comedia, harem

Posiblemente una de las comedias románticas más bizarras y extrañas que se han hecho. Una historia que se atiene a un hecho muy simple: la pareja formada entre un chico y su mano derecha. ¿Cómo está eso? Bueno, francamente eso es todo lo que el autor cree que necesitamos saber. Si, un día una chica enamorada simplemente se queda dormida, y despierta convertida en la mano derecha del chico que le gusta.

Y de ahí sólo pasan a sufrir una serie de aventuras y desventuras que giran en torno a su "relación", involucrándose con las situaciones de otros personajes, intentando regresar a Midori a la normalidad (cuando no están sólo postergando la unión una vez que los dos ya no pueden pensar en otra manera de permanecer juntos).

Con un amplio reparto de personajes extravagantes, Midori no Hibi (también conocida como Midori Days, debido a la tendencia de la chica-mano por pasársela escribiendo un diario), es una historia repleta de comedia, conflictos (muchas veces absurdos), remolinos de emociones, una dosis de fan service (sin abusar demasiado de este recurso) y hasta un poquito de travestismo ocasional.

"Solo uno de los aquí presentes es lo que parece ser"

El dibujo es un tanto simple pero consigue captar la expresividad de los personajes (aun cuando a veces se siente un tanto monótono, como si siempre estuvieran repitiendo las mismas reacciones). Los diseños también son bastante simples, difícilmente haciendo distinción pero el autor que de algún modo les transfiere suficiente personalidad para que no reparemos en este hecho.

El estado de Midori, como el eje central de la trama, implica lo que sin duda es un elemento muy original (para quienes no piensen que sólo es una jalada) aun cuando carece de explicación y lógica alguna (permaneciendo indefinidamente como un plot hole), dando pie a una serie de situaciones jocosas en los que nunca se pierde de vista la manita (por decirlo así).

Personajes:

Seiji Sawamura: El protagonista de esta historia, un joven de mal carácter que se mete fácilmente en peleas y tiene falta de tacto para decir las cosas. A pesar de todo, es un amigo leal que realmente sólo usa la violencia para defenderse y proteger a sus amigos. Su aflicción por no conseguir novia (precisamente por la mala fama que tiene, ninguna chica saldría con alguien a quien reconocen por el mote de "Perro Loco") es resuelta (en cierto modo) al tener a Midori como su mano derecha, iniciando una complicada relación a la que poco a poco va acostumbrándose, oscilando entre actuar bruscamente y hacerse el dulce con ella según su constantes cambios de estado de animo.

Midori Kasugano: La adorable y curiosa media naranja de Seiji. Una chica tímida que desde hace tiempo ha estado enamorada de él, incapaz de confesar sus sentimientos. Al expresar su deseo de estar siempre con Seiji, sufre la experiencia extracorporal más extraña, tomando el lugar de su mano derecha mientras su cuerpo real permanece en estado aletargado. Aunque no era eso lo que quería decir, acaba alucinada con su nueva situación, animando (cuando no lo está molestando) a su amado todo el tiempo. Tiene la costumbre de escribir un diario (pero casi todo lo que anota es sobre Seiji y los días que pasan juntos).

Rin Sawamura: La extravagante y temible hermana mayor de Seiji. Jefa de una pandilla que vive para embriagarse, andar en fiestas y fastidiar a su hermano a más no poder (ya sea golpeándolo o robándose su dinero).

Conoce el secreto de Midori, tomándolo a la ligera, aunque cuando se pone borracha pierde toda discreción, comprometiéndolos a los dos al exponer sin querer el anormal caso de la mano derecha de Seiji.

Osamu Miyahara: Amigo de Seiji con una tendencia natural para meterse en problemas, siendo secuestrado frecuentemente por bandas enemigas o cayendo en diversas artimañas. Despreocupado y relajado, admira a Seiji e intenta adoptar su actitud pero simplemente no va con su persona, quedando siempre relegado a segundo termino.

Takayo Ayase: Delegada de la clase de Seiji. Una chica con actitud despótica que en un principio aborrecía a Seiji al considerarlo un malviviente, pero termina por enamorarse de él al reconocer sus cualidades. Por orgullo y necedad, suele guardarse sus sentimientos, empleando técnicas sutiles para conquistar a Seiji, casi saboteándose a si misma por persistir en ocultar su lado tierno.

Kouta Shingyoji: Amigo de la infancia de Midori. Un chico tranquilo y tímido que se preocupa enormemente por el estado convaleciente de Midori, empeñado en convencer a Seiji de ir a verla (ignorando que está vetado de esa casa por un malentendido que surgió en un intento fallido por hacer que Midori tocara su propio cuerpo, el cual estaba desnudo bajo las cobijas, poniéndolo en practica justo cuando su madre entraba al cuarto).

Por su inocencia al decir las cosas, suele meterse en problemas y Seiji acude en su auxilio cada vez, provocando que éste desarrolle inconscientemente sentimientos románticos hacia él (aunque nunca lo reconoce pero Midori es más perceptiva y siempre apura a Seiji a escapar en cuanto detecta las feromonas de Kouta).

Shuichi Takamizawa: Un chico poco varonil, fanático obsesivo de las muñequitas (por el simple hecho de que son tiernas, prefiriéndolas antes que tener una novia). Sueña con convertirse en diseñador de ropa para muñecas. Al principio, es engañado sobre la naturaleza de Midori y se empeña en tenerla para si, pero una vez que descubre el secreto, acepta convertirse en su proveedor oficial de ropa. No obstante, su obsesión lo lleva a seguir haciendo cosas vergonzosas como crear un blog de Midori o confeccionar su propia muñeca Midori.

Shiro Makinoha: El villano ocasional del cuento. Un doctor (que también es científico loco de medio tiempo) obsesionado con la idea de disecar a Midori después de que a ella y a Seiji les da por consultar su caso.

Empleando trampas y estrategias que casi siempre implican el uso de androides (principalmente copias mecánicas de su hija, Nao), aparece en los momentos más inesperados para hacerle la vida imposible a la parejita. Ellos lo reconocen por el mote de "Profesor Pervertido".

Nao Makinoha: Una chica misteriosa que casi nunca habla. Es extremadamente lista con habilidades de pelea superiores a las de Seiji, y tiene la costumbre de dar golpes con martillo (sobretodo a su padre). No aprueba los métodos de su padre, saboteando la mayor parte de sus intentos por capturar a Midori, por la cual siente una entrañable adoración, ya que ama lo sobrenatural.

Shiori Tsukishima: Vecina y admiradora de Seiji. Una niña hiperactiva al que él trata como una hermana menor, siempre reclamando su atención. Tiene problemas familiares en un caso de lo más tradicional (falta de cooperación en aceptar a su madrastra por la memoria de su madre fallecida).

Yukina Asano: Amiga de la infancia de Seiji, dibujante aficionada de manga. Siente gran cariño por Seiji, haciendo frecuentemente de él un modelo para sus historias, denotando estar tan metida en eso que apenas tiene interacción con la gente real (fuera de Seiji).

Lucy Winlad: Estudiante de intercambio de Estados Unidos. Una chica animosa e impulsiva que se enamora de Seiji al comparar su porte con el de un samurái, con los que está fascinada y siempre salta encima de él cuando lo encuentra. Aunque en una ocasión llega a ver a Midori, la confunde con un hada.

Miku Nekobe: Líder de la pandilla de las Ángeles Carmesíes. Una chica con cara de gato, enamorada de Kouta, que en un principio pretendía hacerlo su novio a la fuerza. Junto con las miembros de su pandilla, adoptan la tendencia maniática de ponerle vestidos de mujer (además de pelucas y maquillaje para completar la "ilusión"), considerándolo "adorable".

Midori no Hibi es una serie muy divertida, sin pretensiones, que sin extenderse consigue brindarnos un poco de entretenimiento. No del que consideraríamos "sano" pero tampoco lo opuesto, mientras nadie tome muy en serio lo que este manga nos presenta, muy seguramente pasara unos buenos y muy hilarantes ratos.